Loading
Hablar de dinero sigue siendo un tabú en muchas familias mexicanas. No se habla de deudas, ingresos, mucho menos de planeación financiera. Y sin embargo, usamos el dinero todos los días. El 96% de los mexicanos jamás ha tomado un curso de finanzas personales. Esto no es una estadística trivial: explica por qué millones de personas viven al día, piden prestado antes de que llegue la quincena o recurren a tarjetas de crédito para “salir del apuro”.
Un fondo de emergencias es un ahorro destinado exclusivamente para situaciones imprevistas. No es para vacaciones, ni para un gadget nuevo. Es para cubrir eventos como:
Un fondo así puede evitar que una crisis emocional o física también se convierta en una crisis financiera.
🎧 Conoce más ejemplos reales sobre cómo te ayudará tener un fondo de emergencia en el podcast completo:
👉 Escúchalo en Spotify
Empieza poco a poco. Puedes destinar el 5% de tu ingreso mensual, automatizarlo y colocarlo en una cuenta separada o en plataformas como CETES Directo o PIGGO.
Tener un fondo de emergencias no solo es una cifra en el banco. Es dormir tranquilo. Es poder tomar decisiones laborales sin miedo. Es tener el poder de apoyar a alguien que amas. Es vivir con menos ansiedad.